Homenaje a Dominique Jonard
Recordando a Dominique Jonard (1956- 2018)
Este año celebramos la llegada hace 120 años del cine a Michoacán, es buen momento para pensar en qué nos ha aportado esta forma de expresión y en quienes son los personajes que han ofrecido y siguen ofreciendo miradas originales a nuestra vida a través de lo que apreciamos en las pantallas. Una de las figuras más entrañables en este campo es sin duda Dominique Jonard (1956 -2018), francés de origen, purépecha por decisión, franco purépecha por convicción.. Artista plástico que vio en el cine de animación una forma ideal para expresarse acerca de sus preocupaciones vitales.
Para mejor honrar a alguien tan querido y mantener vigentes sus propuestas, es preciso hablar de su persona y de su obra, así en el marco de este encuentro, Leilani Noguez y Javier Morett de la Filmoteca Michoacana, abordaran diversos aspectos de su trascendental vida en un diálogo abierto con quienes asistamos a esta actividad, en un ejercicio de recuperación de la memoria colectiva, mientras que se presentará una selección muy breve de su obra. Se trata de algo más que de simplemente rendir homenaje a un gran creador, más bien de mantener presentes las inquietudes que lo llevaron a plasmar en su cine cuestiones que son plenamente vigente entre todos nosotros Dominique se convirtió en un activo impulsor de los derechos humanos en distintos campos: de niños recluidos por los delitos propios de la marginación y la pobreza, dando voz a su mundo en Desde adentro (1996); los de la cultura de los pueblos originarios que desde la conquista ha resistido a través fundamentalmente de recuperar sus raíces, como en Hapunda (2005) que rescata una leyenda de la cosmogonía purépecha; nos mostró su preocupación por el respeto a la vida, que arranca con el cuidado de la tierra y el ambiente natural, así, Son nuestros bosques (2014), es expresión de un proceso autogestivo en respuesta colectiva a la violenta expoliación que la delincuencia organizada y vinculada a los poderes públicos, hacia las vidas y los recursos de Cherán, una comunidad indígena, que expulsa a los partidos políticos y al Ayuntamiento, con lo que recupera el control de sus recursos y sus vidas. O bien regocijarse con animaciones que retoman relatos populares como en Xani Xepica (este flojo) (2008).
En el basto trabajo desarrollado en una explosión creativa constante, hay una importante aportación de Dominique, la de realizar animaciones participativas, trabajando con niños en relatos y dibujos surgidos de su entorno, animados bajo la guía de Dominique, logrando lo que a veces suena hueco, la de dar voz a los que no lo tienen, porque se hace en representación de otros, sin que los protagonistas intervengan en su creación, en cambio él si lo hace, dando lugar a un maravilloso nosotros. Su recorrido lo lleva a trabajar con niños purépechas, tarahumaras, nahuas, totziles, huicholes. Dejo inconcluso un largometraje, Resistencia, en donde combinaba la animación con técnicas documentales.
Javier Morett (director, escritor, productor)