Durante la mañana de este miércoles 28 de septiembre, en el Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca, Ojo de Agua Comunicación presentó en conferencia de prensa la segunda edición de la muestra de cine y radio comunitaria en Mesoamérica: El lugar que Habitamos.
Con la asistencia de prensa, radio y televisión locales, dimos a conocer detalles sobre la selección, programación e inauguración de esta segunda muestra de producciones radiofónicas y audiovisuales, que en esta ocasión lleva como lema “Compartimos nuestros mundos acercando los medios”.
Paola Morales Vásquez, coordinadora del evento, presentó a los asistentes los ocho programas de exhibición en los que se han dividido las 12 horas de programación que se seleccionaron para la parte videográfica de la muestra. Comentó que el evento comienza en comunidades de Oaxaca el día 21 de octubre próximo, para inaugurarse en esta ciudad el 27 de octubre próximo, en el Jardín del Pañuelito, con la presentación del documental Mover un río, que trata sobre la lucha de la tribu Yaqui, de Sonora, por defender su derecho al agua y su oposición al acueducto Independencia, que les despojaría de este líquido para enviarlo a la ciudad de Hermosilllo. En esta función contaremos con la presencia de su realizadora, Alba Herrera Rivas.
Afirmó Paola Morales que hasta el momento hemos confirmado la presentación de la muestra en 15 sedes de los estados de Oaxaca, Guerrero, Puebla y Yucatán. En otros países de Mesoamérica también hemos comenzado a confirmar las sedes en que la muestra se presentará. En pocas semanas daremos a conocer el recorrido mesoamericano de la muestra.
Por su parte, la periodista y productora de radio Griselda Sánchez, quien realizó la curaduría de la parte radiofónica de la muestra, comentó que se prepararon dos programas de dos horas de duración cada uno. «El primero está dedicado a la memoria de Bertha Cáceres, luchadora social asesinada en marzo de este año, por causa de la oposición que encabezaba a la construcción del proyecto hidroeléctrico de Agua Zarca, que pretende despojar de sus territorios a comunidades indígenas lencas, de Honduras, para construir una represa hidroeléctrica».
«Las producciones que se agrupan en este primer programa relatan la participación de las mujeres en la defensa del territorio. Contamos con producciones del Ecuador, Perú, Costa Rica, Argentina y México; las cuales relatan desde una perspectiva histórica la participación de las mujeres. Como la serie Manatak, que recibimos del Ecuador y que narra de forma sumamente creativa la vida de Dolores Cacuango, una pionera en la defensa de los derechos colectivos de los pueblos indígenas del Ecuador.
«Por parte de Radialistas Apasionados y Apasionadas, del Ecuador también, contaremos con una dramatización sobre la vida de Dorothy Stang, una misionera estadounidense-brasileña que fue asesinada por causa de su apoyo a las comunidades pobres del Amazonas y por su combate a la destrucción de esta selva, por parte de latifundistas y madereros. Presentaremos también un reportaje en que se habla de la situación de los defensores de los DDHH en Bolivia, en Honduras y Guatemala, sobre los riesgos a los que se enfrentan.
«El segundo programa lo dedicamos a los compañeros asesinados en Nochixtlán. Es un poco delicado abordar el tema, respetando el dolor que sigue causando a las familias el asesinato de estas personas, pero lo hacemos considerando que ellos estaban defendiendo sus derechos como parte de un movimiento social, o salieron a defender los derechos de otros.
«Hay una parte del programa en la que mostramos trabajos de cooperativas y de gente que realiza alternativas al desarrollo que propone este modelo extractivista. Conceptualmente estas dos partes se relacionan porque pienso que podemos honrar a los muertos si realmente proponemos y construimos un mundo distinto, que es aquel por el que ellos dieron su vida. Por eso esta parte del programa está dedicada a programas sobre cooperativas de mujeres y a experiencias como el Tumin que tiene que ver con la construcción de una economía solidaria. Es algo muy triste que se liga con una parte esperanzadora».
Finalmente, Guillermo Monteforte, quien coordina una serie de actividades de comunicación popular que Ojo de Agua Comunicación impulsa con la participación de ocho radios comunitarias de Oaxaca, entre las cuales se encuentra esta muestra, explicó el contexto común de despojo que sufren las comunidades indígenas ante los nuevos embates del capital, de tal manera que los problemas que sufren las comunidades del Valle o el Istmo con las compañías mineras, pueden ser muy bien comprendidos, compartidos y apoyados por comunidades indígenas que en países lejanos sufren, en sus propios territorios, exactamente los mismos problemas con las mismas compañías.
De ahí la importancia para las comunidades de pensar y actuar en el ámbito mesoamericano, tanto para compartir sus experiencias, informaciones y luchas, como para denunciar y formar las alianzas que sea posible imaginar a partir de las nuevas tecnologías a las que vamos teniendo acceso y que debemos ir adaptando para nuestros usos y necesidades.
La Primera Muestra de Cine y Radio Comunitarios en Mesoamérica se celebró durante el mes de junio de 2015 con una excelente recepción, tanto por parte de los colectivos que la acogieron en todas las sedes donde se organizó, como por el público. Se presentó en 35 comunidades de Nicaragua, Guatemala, El Salvador, Cuba y los estados de Oaxaca, Chiapas y Yucatán, en México. En su preparación y realización participaron 15 colectivos en las sedes mencionadas y más de 2 mil personas acudieron a las proyecciones de la muestra.
Cabe mencionar que para esta segunda muestra nos hemos propuesto metas algo menos ambiciosas en cuanto a números aunque, de la misma manera que sucedió en la primera, será el interés del público y de los colectivos culturales en cada región lo que determinará el alcance final de la propuesta. Nuestro interés principal es insistir en la necesidad de que la enorme cantidad de materiales audiovisuales que actualmente se producen en nuestros países reflejando realidades sumamente dolorosas y urgentes, encuentren a sus destinatarios e inicien ese diálogo con el público que sus realizadores han deseado desde que comenzaron a concebir sus proyectos.
Por eso, aunque nos emocionan las salas llenas, nos sentimos más satisfechos cuando el público se queda al final de la función para expresar sus ideas y sus sentimientos sobre lo que acaba de ver, cuando es posible propiciar el diálogo entre realizadores y público, entre actores sociales y documentadoras de la realidad, entre los mismos espectadores que asumen su calidad de ciudadanos y de sujetos sociales, entre gente con una diversidad de experiencias y de conjeturas sobre la realidad. Eso lo pudimos lograr en ciertos momentos durante la primera muestra y es nuestra meta más ambiciosa mejorarlo constantemente en las siguientes ediciones.